Esta semana ha comenzado la segunda edición de 16kms, el Festival Internacional de Cine de Cañada Real. Cuando el año pasado un puñado de locas y locos nos lanzamos a esta aventura no pensábamos que iba a ser un proyecto que pudiera consolidarse tan pronto. Sabíamos que era algo necesario, algo bello, algo capaz de mover y movilizar conciencias y actitudes, pero no creíamos que tantas y tantas personas pudiesen identificarse como lo han hecho con él haciéndolo suyo. Éramos, y somos, conscientes de que este festival no nacía para que un grupo de artistas pasease su conciencia social durante una semana por una zona depauperada de Madrid haciendo su obra solidaria. Eso hubiera sido un insulto a nosotros mismos y, sobre todo, a los vecinos y vecinas de Cañada. Un festival como éste solo tiene razón de ser si sirve para que la gente a la que se dirige, esos vecinos y vecinas, lo hagan suyo y les permita mostrar quiénes son y qué es lo que quieren. Por ello nuestra labor debe ser la de aprovechar todas las herramientas que están a nuestro alcance para hacerles llegar los recursos que necesitan para poder hacerlo. Es a partir de ahí donde todos los demás objetivos que tiene 16kms pueden conseguirse: visibilizar la realidad de Cañada como lo que es, un barrio en construcción en el que viven más de 7.000 personas que sueñan como las demás, que se ganan la vida como las demás y que ríen y lloran como las demás. Que hasta ahora solo se haya hablado de Cañada para identificarla con droga, violencia o delincuencia es una de las mayores injusticias que sus habitantes han tenido, y tienen, que soportar. Que existe droga, sí, que existe violencia, también, y que existe delincuencia nadie lo duda, pero se concentra en una parte muy concreta de Cañada, solamente en uno de los 16 kilómetros que mide. Pero las ideas tantas veces repetidas, los silencios cómplices que tantas mesas de redacción han ocupado, acaban por convertirse en estigmas que criminalizan, por acción o por omisión, a miles de personas, niños y niñas en su mayoría. De ahí que sea tan importante para Cañada y para todas las personas de bien que no viven en Cañada que los medios de comunicación se hagan eco de esa otra realidad que se vive en Cañada, la realidad de la vida cotidiana de miles de personas que, como tú y como yo, sueñan, viven y aman. En Cañada conviven diferentes culturas y tradiciones, diferentes razas, diferentes formas de entender la vida y de afrontarla. Y eso es un ejemplo de tolerancia y de convivencia, algo que nos enriquece a todos. Que los niños y niñas nacidos en Cañada tengan en la vida las mismas oportunidades que los demás es algo que nos debería movilizar a todos. Verles descubrir el mundo del cine, hacer sus propias películas, compartir sus sueños, te llega a lo más hondo. Nadie debería dejar de vivir esta experiencia. Es tanta la ilusión, la alegría y el empeño que ponen en ello…
En la edición de este año hemos ampliado los espacios de proyección dentro de la propia Cañada para que el cine pueda llegar a más gente. Las características físicas de Cañada nos han enseñado que las distancias allí son muy grandes. Es como si fuera una única calle que mide 16 kilómetros, con el agravante de que no está pavimentada, y que en ocasiones está separada por autovías que la cruzan con sus puentes, salidas y desvíos. El sentido común se impone y, si quieres acercar algo, lo que sea, a alguien, debes ser tú quien se acerque. De ahí la necesidad de abrir nuevos espacios de proyección. Eso conlleva mayores dificultades logísticas y económicas para el festival, pero nada que no pueda lograrse sin la ayuda de todas las personas e instituciones que lo apoyan, con el Ayuntamiento de Madrid a la cabeza, la Comunidad y otras administraciones relacionadas con Cañada, como las juntas de distrito de Vicálvaro o Vallecas. La labor de apoyo que las entidades que trabajan en Cañada han prestado y prestan al festival es uno de los pilares sobre los que se ha consolidado ya que son ellas, las personas que trabajan en ellas, las que conocen la realidad diaria de todos los vecinos y vecinas, las que nos permiten llegar a ellos para conocer lo que necesitan y lo que podemos ofrecerles, para hacerles llegar una preselección de películas que ellos programen. Y ahí el papel jugado por entidades como Fundación Secretariado Gitano, Arquitectura Sin Fronteras, Accem, Al Shorok, El Fanal, Barro, Cáritas, Cruz Roja, y la obra social de La Caixa a través del proyecto ICI ha sido fundamental.
Este festival visibiliza el trabajo que estas entidades realizan en Cañada. Los talleres de audiovisual o música que la Fundación Voces, organizadora del festival, realiza allí durante todo el año se incrustan en los que llevan a cabo estas entidades prestando apoyo escolar, etc. En la edición de este año, además de contar con más espacios de proyección, tenemos toda una serie de actividades paralelas que se vertebran alrededor del cine: intervenciones de arte mural, talleres de cine, conciertos de hip-hop, proyecciones de imágenes de películas épicas acompañadas de la interpretación de sus bandas sonoras en directo, conciertos de música marroquí, danza, gastronomía, coloquios vertebrados en torno a los cuatro grandes ejes que propone el festival (género, migraciones, arte y transformación social y cultura de paz) Para acercar Cañada a Madrid, de nuevo este año contamos con el espacio de la cineteca en el Matadero, donde desde el próximo viernes al domingo veremos los cortometrajes hechos por chavales de Cañada y de otros lugares que tienen realidades y problemáticas similares en otras partes del mundo, junto a otras películas que acompañarán a los coloquios sobre arte y transformación social o de seguridad y cultura… Cada año el festival invita a un país que tiene fuerte presencia en Cañada, de forma que puede acercarnos su cine, su arte, su cultura… El año pasado fue Rumanía el país invitado, esta año es Marruecos, que estará presente con la proyección de varias películas de su cine, uno de los más interesantes y atractivos del momento.
Otra de las innovaciones de esta edición son las jornadas que sobre arte e intervención social organiza el festival en la casa de las asociaciones de Rivas Vaciamadrid en las que, además de talleres específicos, diversas personas que llevan años trabajando en primera línea el arte como medio de transformación social expondrán sus experiencias a educadores y trabajadores sociales.
Ayer también vivimos una nueva experiencia en el festival: un maratón de cortometrajes express. Tres directores profesionales de cine (Lluvia Rojo, David Ilundain y Diego Saniz) junto a Raúl Silva, un vecino de Cañada de 16 años que lleva cuatro participando en nuestros talleres de cine y que ha realizado ya varios cortos y un largometraje, formaron cuatro grupos con niños y niñas de Cañada para hacer en doce horas un corto de una duración máxima de tres minutos sobre un tema elegido por sorteo en el mismo momento en que se formaron los grupos. El tema fue “el respeto a la diferencia” Los 4 grupos debatieron sobre lo que querían contar, cómo hacerlo, lo guionizaron, hicieron el casting, adjudicaron los trabajos técnicos a los miembros del equipo (cámara, sonido, etc.), eligieron las localizaciones donde grabar y… grabaron. A última hora de la tarde todos habían entregado ya su material, un material que se editará durante esta semana y que, junto a la banda sonora que compondrán dos jóvenes músicos de la orquesta joecom y que será interpretada en directo en la proyección de los 4 cortos el próximo fin de semana, nos permitirá a todos ver esos trabajos en la clausura del festival. La ayuda de cinco licenciados de la ECAM incrustándose en cada grupo para resolver las posibles eventualidades técnicas que pudieran ir surgiendo y de los educadores sociales que también se incorporaron a esta iniciativa, fue toda una garantía de éxito.
El apoyo que la profesión ha dado al festival con la concesión de premios como el especial de la Unión de Actores o el González Sinde de la Academia de Cine, se ve acompañado por la participación de muchos compañeros y compañeras que se acercan a colaborar con el festival. El viernes, en la inauguración, fueron Silvia Marsó y Pedro Casablanc quienes quisieron apoyarnos y ayer noche Dani Guzmán y Antonio Bachiller presentaron su película “A cambio de nada” y debatieron tras la proyección con los chavales de Cañada. Degustar un esplendoroso cuscús hecho por los vecinos viendo la película es una experiencia que nadie, absolutamente nadie, debería dejar de vivir.
Esta tarde, con motivo de la celebración del día mundial por la paz, hemos abierto la sesión con un coloquio en el que han intervenido el imán del sector 4 de Cañada junto a Agustín, el cura del sector 6, junto a ellos han intervenido Federico Mayor Zaragoza recordándonos que la paz es posible y que, como le dijo Nelson Mandela, es imparable, porque la traerán las muejres ya que ellas raramente utilizan la violencia mientras los hombres raramente no la utilizamos. También ha intervenido Fina Ancín contándonos su experiencia como voluntaria en el campo de refugiados de Idomeni y presentando el documental «Los sueños de Idomeni», de Amparo Climent y Héctor Melgares. Tras esta charla por la paz Juan Antonio Simarro nos ha ofrecido un maravilloso concierto acompañado de Irene Rouco al chelo, y Ahmad Joured ha bailado su coreografía One in a million y nos ha contado cómo la danza le ha permitido escapar del horror de la guerra en Siria. Aquí tienes algunas fotos de lo que ha sido una tarde absolutamente inolvidable. En el ensayo de esta tarde unos chavalines se han acercado al ver a Ahmad bailar. Nunca habían visto ballet. Se han emocionado tanto que han empezado a imitarle. Le han llegado a lo más hondo y nos ha pedido poder dar mañana, antes de regresar a Holanda, un taller gratuito de danza a los chavalines de Cañada.
16kms es un festival organizado por y para la gente de Cañada que invitan a todas y todos los que quieran acercarse a él. Todas las actividades, tanto en los espacios de Cañada como de Matadero, son gratuitas y, durante los fines de semana, hay un servicio de autobuses que lleva directamente desde Conde de Casal (junto al hotel Claridge) a los diferentes espacios de proyección. Allí estaremos hasta el domingo 24. Tienes toda la programación, los espacios y forma de llegar a ellos en nuestra web www.16kms.org Te invitamos a compartir nuestro sueño. Acércate, ven, conócenos. Os esperamos a ti y a ese soñador que llevas dentro, con los brazos abiertos.